Nike Studios llega en un mundo donde la conexión entre marca y consumidor se redefine constantemente, Nike ha decidido no solo observar el cambio, sino liderarlo. Con la presentación de Nike Studios, su innovador concepto de estudio boutique de entrenamiento, la marca del swoosh trasciende la ropa deportiva para convertirse en un proveedor integral de experiencias. El proyecto, lanzado en 2023 y desplegado gradualmente desde principios de 2024, representa mucho más que una incursión en el fitness físico: es una estrategia maestra de marketing experiencial, diseño de marca y recopilación de datos.
Entrenar en la marca, no solo con la marca
Nike Studios no es un gimnasio tradicional. Desde la arquitectura del espacio hasta el formato de las clases, todo está pensado para reforzar la identidad de la marca sin que parezca que se está vendiendo algo. Al cruzar sus puertas en Londres, Tokio, West Hollywood o el nuevo estudio insignia de Irvine, California, los usuarios no encuentran estanterías de productos ni discursos comerciales. Encuentran movimiento, diseño minimalista, entrenadores vestidos de Nike y una experiencia fluida y digitalizada a través de la app Nike Training Club.




Los estudios funcionan bajo un modelo boutique pay-per-use con clases reducidas, de 10 a 15 personas, enfocadas en HIIT, yoga, fuerza funcional y recuperación. Sin contratos, sin inscripción. Simplemente reservas tu clase, entrenas y sales. Así, la barrera de entrada se reduce, y el compromiso se construye con base en la experiencia, no en la obligación.
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Un espacio físico como laboratorio de marca
Más allá de ofrecer un entrenamiento eficiente, Nike ha creado un entorno controlado donde puede observar, analizar y aprender. Cada clase, cada reserva, cada playlist elegida y cada feedback ingresado en la app se convierten en datos valiosos. Es una estrategia de retail-as-research donde el producto (ropa, calzado, accesorios) se prueba en tiempo real, en condiciones reales, con usuarios reales.




Este enfoque permite a Nike iterar sobre sus diseños, validar hipótesis de consumo, e incluso personalizar experiencias basadas en el comportamiento de los usuarios. El estudio no es solo un espacio de ejercicio físico, es un banco de pruebas que retroalimenta las decisiones de negocio.
La experiencia por encima de la transacción
Mientras que las grandes cadenas de gimnasios compiten por volumen y membresías, Nike apuesta por la relevancia. En un momento en el que la lealtad a la marca está fragmentada y las opciones de fitness se multiplican, Nike Studios ofrece un entorno íntimo, cuidado y sin presión. No hay competencia interna, no hay selfies, no hay métricas públicas. Solo constancia, comunidad y movimiento.
Esta visión responde a las nuevas motivaciones del consumidor: buscar experiencias significativas, conexión local, control digital y propósito de marca. Los altos índices de repetición (70% en los primeros 60 días en Londres), las clases agotadas y la satisfacción superior al 90% reflejan una fórmula que resuena.
Nike como proveedor de estilo de vida
Con Nike Studios, la marca consolida su paso de ser una compañía de productos a convertirse en una plataforma de estilo de vida. Ya no se limita a inspirar a través de atletas y campañas. Ahora crea entornos donde el consumidor puede vivir la marca, literalmente. Se trata de una integración física y digital que fortalece el ecosistema Nike, desde la app hasta el vestuario, desde la playlist hasta la sensación de pertenencia.
Además, este movimiento permite a la marca recuperar control total sobre la experiencia del usuario, sin intermediarios como gimnasios o distribuidores. Cada interacción es directa, cada dato es propio, cada historia de éxito es compartida en sus propios canales.
¿Qué sigue?
Nike ha dejado claro que los estudios no están pensados para escalar masivamente, sino para expandirse estratégicamente. Con planes en evaluación para ciudades como Manchester, Berlín y Nueva York, cada nuevo estudio será adaptado localmente, con entrenadores de la zona y programación culturalmente relevante. Más que una red de gimnasios, Nike Studios se perfila como una serie de campañas vivas que evolucionan en función del contexto, el usuario y la marca.
La apuesta es clara: mientras otros venden membresías, Nike crea comunidad. Mientras otros compiten por permanencia, Nike cultiva lealtad. Y en esa diferencia, no solo redefine el entrenamiento. También redefine cómo se construye una marca en el siglo XXI.
Desde una perspectiva de marketing deportivo, Nike Studios representa una estrategia exitosa por varias razones clave que combinan experiencia, conexión emocional, innovación y control de marca. Aquí te explico por qué:
1. Transforma el producto en experiencia
Nike no solo vende ropa deportiva: ahora vende cómo se vive esa ropa en movimiento. Con Nike Studios, la marca convierte sus productos en parte de una experiencia tangible. Esto permite que el consumidor no solo use Nike, sino que entrene dentro del universo Nike, lo que refuerza la lealtad a la marca y mejora la percepción de calidad y utilidad del producto.
2. Conexión emocional y comunidad
El marketing deportivo moderno se basa en la construcción de comunidades auténticas. Nike Studios ofrece espacios pequeños, sin competencia ni teatralidad, donde las personas pueden entrenar en un ambiente sin juicios. Esto genera una conexión emocional profunda con la marca, al alinearse con valores actuales como el bienestar, la inclusión y la autenticidad.
3. Integración total del ecosistema Nike
Cada visita al estudio se integra con la app Nike Training Club, reforzando el uso de sus plataformas digitales. Esto aumenta la interacción omnicanal, lo que mejora el engagement y facilita estrategias de marketing personalizado basadas en datos de uso, preferencias y comportamiento de los usuarios.
4. Recopilación de datos valiosos en tiempo real
En lugar de depender solo de estudios de mercado, Nike crea entornos físicos donde observa directamente cómo se comportan sus usuarios, qué equipo usan, qué tipo de clase prefieren y cuándo entrenan. Esta data se convierte en insumo estratégico para nuevas colecciones, ajustes de producto y campañas de marketing más precisas.
5. Reposicionamiento como marca de estilo de vida
Con esta estrategia, Nike va más allá del deporte competitivo y se posiciona como una marca de bienestar urbano, adaptada al consumidor moderno que busca rendimiento, pero también salud, comunidad y diseño. Esto amplía su audiencia objetivo y la aleja de la guerra de precios o modas pasajeras del fitness.
6. Diferenciación frente a competidores
Nike no busca competir directamente con cadenas como Barry’s o F45. En cambio, crea su propio espacio: no es un gimnasio, es un laboratorio de movimiento. Esta diferenciación permite que el consumidor asocie Nike Studios no con una tendencia, sino con una nueva forma de vivir el entrenamiento.
7. Control total del entorno de marca
Al crear espacios propios, Nike elimina intermediarios (gimnasios, distribuidores, terceros) y controla toda la experiencia de marca, desde el entrenamiento hasta el uniforme del entrenador, la música y la tecnología. Esto asegura una coherencia total con su narrativa de marca global.
8. Modelo escalable con estrategia de exclusividad
Aunque no es un modelo masivo, Nike Studios está diseñado para escalar en ciudades clave, posicionándose como una experiencia premium, local y personalizada. Esto genera un efecto de exclusividad aspiracional: quien entrena en un estudio Nike, es parte de un grupo selecto que vive el fitness de otra manera.