El jugador francés Kingsley Coman fue multado con 50 mil euros por llegar a un entrenamiento en una camioneta Mercedes Benz Clase G, y no en el auto que al principio de temporada fue entregado por la marca patrocinadora Audi al Bayern Múnich.
Dentro del contrato que tiene el club Bávaro se establece que todos los jugadores utilizan los autos Audi para dirigirse al club y sus eventos, además Audi tiene participación del 8,33% en el club y su patrocinio tiene un valor de alrededor de 50 millones de euros anuales, con un contrato que va hasta 2029.
No es la única vez que Coman infringe esta norma la lo había hecho en en la primavera del 2020 cuando apareció a un entrenamiento con un McLaren 720 s en esa ocasión el delantero francés manifestó «Iba tarde y el Audi tenía un retrovisor dañado. No quiero que lo tomen mal, de todos modos fue un error y quiero disculparme con el equipo y con Audi por no llegar al entrenamiento en el coche que debía».
¿Desconocimiento del jugador por la norma? ¿El club no comunica este tipo de patrocinios a sus jugadores? lo cierto es que es la segunda vez que ocurre y la marca patrocinadora se puede sentir irrespetado.
