Uno de los conceptos más intrigantes en este contexto es el Ambush Marketing, una estrategia que permite a las marcas beneficiarse de la exposición de un evento sin ser patrocinadores oficiales. En el XLI Maratón de la Ciudad de México, Nike desplegó una campaña de Ambush Marketing que desafió directamente a Adidas, el patrocinador oficial del evento.
A través de una serie de acciones creativas, Nike logró una presencia destacada que dejó una fuerte impresión en los corredores y espectadores. En este artículo, exploraremos las tácticas empleadas por Nike, cómo estas impactaron en la percepción del evento y qué lecciones se pueden aprender de este enfrentamiento entre gigantes del deporte.
Contexto del Maratón y la Competencia Entre Nike y Adidas
El Maratón de la Ciudad de México es uno de los eventos deportivos más importantes de América Latina, atrayendo a miles de corredores de todo el mundo. En su edición XLI, Adidas se posicionó como el patrocinador oficial, asegurando una visibilidad predominante. Sin embargo, Nike, conocido por su enfoque agresivo y disruptivo en marketing, no dejó pasar la oportunidad de desafiar a su rival, empleando tácticas que jugaron con la delgada línea entre la competencia leal y la ingeniosa astucia del Ambush Marketing.
Anuncios OOH a lo Largo del Recorrido
Una de las primeras señales del desafío de Nike fueron los anuncios OOH (Out of Home) estratégicamente ubicados a lo largo del recorrido del maratón. Estos anuncios, colocados en puntos clave donde la concentración de corredores y espectadores era máxima, no mencionaban explícitamente el maratón, pero utilizaban imágenes, frases y colores que evocaban claramente la carrera y la cultura del running. El mensaje sutil pero efectivo de Nike logró captar la atención sin infringir las reglas del patrocinio. Esta presencia constante a lo largo del recorrido reforzó la asociación de la marca con el evento, desviando parte del protagonismo de Adidas.
Los avisos no tenían imagen, solo eran frases
La publicidad se centró exclusivamente en mensajes de texto, sin imágenes, diseñados para motivar a cada runner. Se utilizó un fondo naranja vibrante con tipografía negra en negrita para garantizar una excelente legibilidad. Los copys incluían frases cotidianas y familiares para los runners, logrando que se sintieran identificados y conectados con el mensaje.
Algunas de las frases fueron:
- «Dale, dale, dale, no pierdas el ritmo»
- «Deja de hacer matemáticas y ponte a correr»
- «Bienvenido al club del 1%»
- «No será fácil, pero será épico»
- «Estás a 2.195 km de ser maratonista»
- «Y pensar que lo hacías por una selfie»
- «Aunque no lo creas, lo volverás a hacer»
- «Claro, de bajada todos vuelan»
- «Dijiste maratón, no medio maratón»
- «Estás a 3 power songs de ser maratonista»
- «Si no piensas en la ampolla, no existe»
El Impacto en la Percepción del Público y de los Medios
La ejecución de estas tácticas por parte de Nike tuvo un impacto notable en la percepción del público y de los medios de comunicación. Aunque Adidas mantenía el estatus de patrocinador oficial, muchos corredores y espectadores percibieron a Nike como una presencia igualmente dominante en el evento. Las redes sociales se inundaron con fotos, videos y comentarios que destacaban las acciones de Nike, eclipsando en algunos casos las iniciativas oficiales de Adidas. La habilidad de Nike para capitalizar la atención del público sin violar los términos del patrocinio oficial demostró una vez más su maestría en el Ambush Marketing.
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Lecciones Aprendidas y Consideraciones Éticas
El enfrentamiento entre Nike y Adidas en el XLI Maratón de la Ciudad de México ofrece valiosas lecciones sobre el poder del Ambush Marketing en los eventos deportivos. Si bien esta estrategia puede ser altamente efectiva, también plantea cuestiones éticas y legales que las marcas deben considerar. En este caso, Nike logró navegar por el terreno delicado del Ambush Marketing con gran habilidad, evitando infringir las normativas y ganándose el respeto por su creatividad. Sin embargo, la línea entre lo ingenioso y lo desleal puede ser muy fina, y las marcas deben ser conscientes de los riesgos asociados.
El uso del Ambush Marketing por parte de Nike durante el XLI Maratón de la Ciudad de México no solo desafiaba a Adidas, sino que también redefinía las reglas del juego en el marketing deportivo. A través de anuncios OOH, activaciones sorpresa y zonas de impulso, Nike logró asociar su marca con el evento sin ser un patrocinador oficial, demostrando que la creatividad y la audacia pueden nivelar el campo de juego. Este caso se convierte en un estudio fascinante sobre cómo las marcas pueden competir en el escenario deportivo sin necesidad de ser patrocinadores oficiales, siempre y cuando lo hagan con ingenio y ética.